Con el lema "Una nueva Evangelización para un nuevo Paraguay" nuestros obispos de la CEP han dado inicio a este nuevo año litúrgico nos han lanzado el compromiso de ser agentes protagonistas de este desafío.... construir desde la evangelización a nuestros pueblos un nuevo Paraguay.. Pero este desafío implica revisar nuestros modelos de evangelización y recrearlos para que las transformaciones sean posibles, y que la presencia de Jesucristo se encarne en la vida de nuestro país.
La nueva Evangelización implica una renovación... pero una renovación desde la FE e impulsados por el Espíritu Santo quien es el que con celo lleva y sostiene toda la obra evangelizadora.... Implica remar mar adentro y sumergirnos en las bases de nuestra sociedad, transformar las realidades terrenas....
Que el Espíritu del Señor que vino viene y vendrá nos implulse a ser los protagonistas de esta nueva Evangelización.....
“UNA NUEVA EVANGELIZACIÓN PARA UN NUEVO PARAGUAY”
Con este lema comenzamos un nuevo año pastoral en la fiesta de Caacupé, Navidad en familia de este año nos introduce en la preparación para celebrar el bicentenario de la independencia nacional. Un hito histórico que nos compromete con el futuro del país y de la Iglesia.
El tema de la Nueva evangelización viene reflexionándose desde hace 30 años. Es la búsqueda permanente para encontrarnos con Cristo, que en la historia del mundo abrió una nueva perspectiva para la humanidad. Es Jesús nacido en Belén de la joven de Nazareth llamada María. Este acontecimiento singular marca la presencia encarnada de Dios entre los hombres de todos los tiempos. Es entonces una nueva historia, una nueva mentalidad, una nueva visión del destino de todos los hombres en el mundo mirando hacia la eternidad en el Reino de Dios.
La nueva evangelización es el anuncio de la presencia del amor de Dios sobre todo el universo, principalmente en el misterioso universo del corazón humano. Porque es en este espacio donde se realizan las grandes transformaciones de cada persona que se preocupa por realizar sus sueños de eternidad. Es el corazón humano, como un nuevo Belén el que se abre para recibir al Salvador, juntamente con María y José. Es Belén el lugar privilegiado para encontrar el amor de Dios. Cada familia debe comprometerse con la nueva evangelización que quiere promover un nuevo estilo de vida en nuestro país.
El nuevo estilo es justamente vivir los valores del amor a Dios y al prójimo. Estos valores generarán un espíritu de justicia, de verdad para poder gozar de la paz que todos deseamos. Así, pues, en un corazón lleno de la presencia de Dios brotarán la honestidad, el respeto al semejante, la ayuda solidaria al necesitado y se difundirá por todas partes, desde el centro de la familia un cántico nuevo para un nuevo Paraguay.
+ Pastor Cuquejo
Arzobispo de la Stma. Asunción
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